jueves, 23 de diciembre de 2010

Pulse Start para comenzar: Super Off Road

Bienvenidos una vez más a "Pulse Start para comenzar". Hoy, debido a mi dolor de garganta, estómago y estar hecho un poco mierda en lineas generales voy a recurrir a un artículo un poco comodín, pero que a buen seguro hará que a todo aquel que lo recuerde le vengan buenas sensaciones a la mente.

Corre el año 1989, el telón de acero y el muro de Berlín están punto de caer; se produce la muerte de Sergio Leone, Dolores Ibárruri "La Pasionaria" y James Bond (el ornitólogo, no el agente secreto). Ken Follet publica su magnum opus, "Los pilares de la tierra"; Alain Prost se proclama campeón del campeonato de Fórmula 1; el mundo del cine es invadido por joyas como "Batman", "Indiana Jones y la última cruzada", "Tango y Cash"", "Cazafantasmas 2", "Regreso al futuro 2", "Arma Letal 2" (sí, la de la bomba en el váter), "El club de los poetas muertos",  "Black Rain" o "Licencia para matar" (este sí que es el James Bond que estais pensando). En el panorama musical destaca Madonna con "Like a Prayer" y Camilo José "El Palanganas" Cela obtiene el Premio Nobel del Literatura. Además de esto cabe destacar un hecho menor originado en Japón cuando una empresilla de medio pelo llamada Nintendo saca al mercado un trasto llamado Game Boy (dos telediarios duró).

En el mundo de los videojuegos surgen auténticas joyas del calibre de Pang, Castlevania 3, Patoaventuras, Leisure Suit Larry 3,  Indiana Jones y la última cruzada, Golden Axe, Super Mario Land, Las tortugas ninja o... sí, señores: ¡el primer buscaminas!

Pero todos estos títulos mencionados son merecedores de su propio artículo (tiempo al tiempo) , de modo que por ahora centrémonos en el tema que nos ocupa; ya que entre todas estas joyas que acabo de mencionar se hizo un hueco una producción de Leland Corporation publicada por Virgin Games llamada...



Ivan "Ironman" Stewart's Super Off Road (más conocido como "Super Off Road" o "Ironman" a secas) era un juego de carreras simple hasta extremos insospechados, pero con un nivel de adicción inversamente proporcional a su simplicidad.

En este juego nos poniamos a los mandos de una poderosa camioneta roja todoterreno al más puro estilo americano (aunque si no me equivoco el juego era británico) por circuitos tan escarpados y accidentados como se pudiese uno imaginar en una competición contra otros 3 pilotos (uno de ellos el propio Ivan Stewart en su camioneta plateada) por la victoria final. El juego se componía de 99 carreras a lo largo de 8 circuitos diferentes, aunque a día de hoy no tengo constancia de nadie que se lo consiguiese acabar.

(Sí señores, el circuito se llama "Huevos Grande")

Para ayudarnos en nuestra empresa, el Super Off Road incluía una característica pionera en sus días que ha sido desde entonces utilizada en la mayoría de juegos de conducción conocidos, desconocidos, habidos y por haber: la opción de mejorar nuestro vehículo. A día de hoy esto puede parecer una opción más que rudimentaria y básica, pero hemos de tener en cuenta la importancia de este hecho en aquel entonces. El juego nos permitía así mejorar nuestras ruedas, suspensión, velocidad punta, aceleración y, además, otro clásico del género, las cargas de nitro (turbo, si lo preferís).

 (En el taller de la Señorita Pepis hay de todo)

El juego tuvo tanta repercusión que un par de años después saldrían versiones clónicas para plataformas tan dispares como Amiga, Amstrad, Atari, CPC, Commodore, DOS, Game Boy, Game Gear (esa gran olvidada), Lynx, Master System, Mega Drive, Spectrum, NES y, un tiempo después, incluso una versión mejorada para SNES.

(No me negareis el encanto de jugar aquí)

Finalmente para cerrar un post bastante más corto de lo que acostumbro símplemente invitaros como  es habitual a probar el juego (probablemente necesiteis un emulador de DOS). Espero que lo disfruteis tanto como yo.

1 comentario:

  1. Este lo tuve yo muchos años en mi Compaq Presario. Tenía un vicio muy importante a este juego, sí señor. Además ya lo había borrado de mi mente, ni me acordaba de su existencia.

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